El verano es la época del año en
la que los pies toman mayor protagonismo pero también es cuando más sufren.
Cuidar los pies no es sólo una cuestión de estética, también resulta
beneficioso para la salud. Tratamientos como la pedicura mejoran el estado de pies
y uñas favoreciendo la comodidad al caminar y mejorando su apariencia estética.
La pedicura consiste en eliminar
de los pies todo tipo de durezas y pieles muertas, cortar las uñas y exfoliar
la piel. A continuación se práctica un masaje para relajar los pies y, una vez
conseguido, se procede a esmaltar las uñas con una doble capa de pintauñas.
Este tratamiento estimula la
circulación de la sangre y aumenta el bienestar a la hora de caminar. Algunos
centros de belleza utilizan para la pedicura productos orgánicos y naturales,
geles, sales, aceites y cremas. Además, si se trata de pies cansados, se
aplican tratamientos con algas marinas para reducir la hinchazón.
Los centros de belleza son
conscientes de que la preocupación por la belleza y el bienestar es cada vez
más común entre las personas. Cada día son más los hombres y mujeres que se
interesan por mejorar su aspecto en general y el estado de sus pies en
particular. Muchos establecimientos de belleza se conciben como verdaderos
oasis de tranquilidad donde los clientes se relajan y disfrutan de los
cuidados.